En el corazón del Parque México, el Foro Lindbergh, uno de los conjuntos arquitectónicos más emblemáticos de la Ciudad de México, está recibiendo una intervención integral para restaurar su belleza original. Este espacio, joya del estilo Art Déco construida en 1927 por el arquitecto Leonardo Noriega y el ingeniero Javier Francisco Stávoli Llamas, había sido afectado recientemente por grafitis y otros daños, pero ahora se encuentra en proceso de limpieza y mantenimiento para asegurar su conservación.
Para atender el daño causado el pasado 2 de noviembre, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), en colaboración con el Gobierno de la Ciudad de México, activó un protocolo de restauración diseñado especialmente para preservar el patrimonio artístico de la capital. Este protocolo es respaldado por un equipo técnico especializado que incluye a personal del INBAL, la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México y otras instancias locales, como la Alcaldía Cuauhtémoc.
Entre las labores prioritarias que se están realizando destacan:
- Remoción de grafitis y pegatinas en las superficies que protegen los relieves creados por el muralista Roberto Montenegro, devolviendo a las piezas su apariencia original.
- Reparación de daños por intemperismo, como la eliminación de vegetación que afecta las estructuras, la limpieza de suciedad acumulada y la restauración de áreas con aplanados deteriorados.
- Limpieza general del conjunto arquitectónico, enfocada en las secciones afectadas por la actividad humana, para preservar sus elementos distintivos de Art Déco.
Estas acciones comenzaron el lunes 4 de noviembre, y se espera que concluyan este mismo mes, gracias al financiamiento aportado por el Gobierno de la Ciudad de México. El proyecto busca no solo mejorar la apariencia del Foro Lindbergh, sino también proteger su valioso carácter patrimonial para que residentes y visitantes puedan seguir disfrutando de este icónico espacio en la colonia Hipódromo.
Con esta intervención, el INBAL y el gobierno local reafirman su compromiso con la preservación del patrimonio cultural de la ciudad, garantizando que espacios como el Foro Lindbergh continúen siendo puntos de referencia histórica y cultural en el paisaje urbano de la capital.
