El sake japonés sigue conquistando el mundo. En 2024, sus exportaciones alcanzaron un nuevo récord al llegar a 80 países y regiones, con un incremento del 6% en valor y volumen con respecto al año anterior. Además, la inscripción del sake como Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO y su creciente popularidad en la alta gastronomía han impulsado su presencia global.

Expansión global y nuevos mercados

Durante 2024, el valor de las exportaciones de sake alcanzó los 43,500 millones de yenes, con un total de 3.45 millones de cajas (equivalentes a 9 litros cada una). El precio promedio por botella de 750 ml fue de 1,050 yenes, reflejando la creciente demanda de sake premium en mercados internacionales.

Comparado con 2020, los destinos de exportación aumentaron en 19 países, mientras que el valor total de las exportaciones creció un 80%, consolidando al sake como una bebida de prestigio a nivel mundial.

Sin embargo, la región asiática, que representa el 61% de las exportaciones, experimentó una caída del 3% debido a la contracción del mercado chino (excluyendo Hong Kong), que descendió un 6%. Por otro lado, países como Corea del Sur mostraron un impresionante crecimiento del 29% en la importación de sake.

En contraste, mercados como Norteamérica, Europa y Latinoamérica registraron un notable aumento. Estados Unidos, con un crecimiento del 27%, fue clave en esta expansión, destacando la integración del sake en menús de maridaje en restaurantes de alta cocina. En Europa Occidental, las exportaciones crecieron un 18% interanual y un 148% en comparación con 2020, gracias a la colaboración con la industria vinícola.

Impulso educativo y reconocimiento internacional

El éxito del sake en el extranjero no solo se debe a su sabor único, sino también a los esfuerzos de la Asociación de Productores de Sake y Shochu de Japón (JSS) para difundir su cultura. En 2024, la JSS llevó a cabo diversas iniciativas educativas, como un Boot Camp para sommeliers en España y una clase magistral en la Universidad de Cádiz. Además, invitó a sommeliers de élite a Japón para que conocieran de primera mano el proceso de elaboración del sake.

Otro hito importante fue la participación en ferias internacionales como ProWein 2024 en Alemania, ProWine São Paulo 2024 en Brasil y Warsaw Wine Experience 2024 en Polonia, buscando ampliar la distribución y presencia del sake en nuevos mercados.

Un reconocimiento histórico: el sake en la UNESCO

Uno de los logros más significativos del año fue la inscripción del conocimiento y habilidades tradicionales en la elaboración del sake con moho koji en la Lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO. Esta distinción, otorgada el 4 de diciembre en Asunción, Paraguay, reconoce la maestría de los toji (maestros cerveceros) y su papel en la preservación de esta milenaria tradición.

Asimismo, el sake tuvo una aparición destacada en la final del Concurso ASI de Mejor Sommelier de Europa, África y Medio Oriente 2024, donde se incluyó una prueba de servicio dedicada a esta bebida, consolidándola como un imprescindible en la formación de sommeliers internacionales.

El futuro del sake: estrategias y expansión

A pesar de los desafíos logísticos y económicos, la industria del sake continúa en ascenso. Para 2025, se espera una mayor expansión en regiones como el sudeste asiático, Latinoamérica y Europa Central y del Este. Con estrategias regionales enfocadas y un creciente reconocimiento internacional, el sake japonés se perfila como una de las bebidas con mayor potencial en el mercado global.

Con cada sorbo, el mundo sigue descubriendo la riqueza y sofisticación de esta emblemática bebida japonesa. ¿Te animas a probar un buen sake?