Desde 1936, la Escuela Superior de Música (ESM), adscrita a la Subdirección General de Educación e Investigación Artísticas (SGEIA) del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), ha sido un semillero de talento donde diversas generaciones de músicos han encontrado un espacio para desarrollar su arte y su vocación.
🎼 Una escuela con raíces obreras y pasión por la música
La historia de la ESM comenzó en 1935, cuando José Muñoz Cota, jefe del Departamento de Bellas Artes de la Secretaría de Educación Pública, impulsó la creación de una escuela de educación musical superior. Su objetivo era claro: abrir oportunidades de formación a músicos líricos—aficionados, obreros y empleados—que no podían acceder a la instrucción ofrecida por el Conservatorio Nacional de Música (CNM).
Así, el 1 de abril de 1936 inició actividades bajo el nombre de Escuela Nocturna de Música para Trabajadores y Empleados, operando dentro del Conservatorio Nacional en horario nocturno. A pesar de las limitaciones iniciales de recursos, la escuela ganó prestigio rápidamente, lo que llevó a su transformación en la Escuela Superior Nocturna de Música tras su incorporación al presupuesto federal.
Durante la década de 1940, su creciente reconocimiento consolidó su papel como un espacio clave para la educación musical superior, permitiendo su desvinculación del Conservatorio y su incorporación al INBAL en 1946.
📚 De escuela nocturna a referente en formación musical
Con el paso de los años, la ESM continuó evolucionando:
- 🎹 1955: Se trasladó a Cuba 92, ampliando su oferta educativa al nivel infantil.
- 🎵 1969: Adoptó el nombre de Escuela Superior de Música.
- 🎓 1980: Comenzó a otorgar el grado académico de licenciatura.
- 🎷 1998: Inició la Licenciatura en Jazz, abriendo nuevas posibilidades para músicos interesados en este género.
- 🏢 1999: Se inauguró un nuevo plantel en el Centro Nacional de las Artes (Cenart), ampliando sus instalaciones y su impacto educativo.
🎤 Una comunidad unida por la música
La docente y exalumna Sandra Jáuregui recuerda con cariño sus años como estudiante en la ESM: “Era una escuela pequeña, prácticamente todos nos conocíamos, éramos como una gran familia”, comenta. Uno de los momentos más memorables para ella fue participar en la puesta en escena de la ópera Sor Angélica, de Giacomo Puccini, donde estudiantes de diferentes instrumentos y canto trabajaron juntos para dar vida a esta obra.
Ahora, como docente, Jáuregui enfatiza la importancia de brindar a las y los estudiantes herramientas que les permitan afrontar los retos del mundo actual, como la inteligencia artificial, que está transformando tanto los ámbitos científicos como artísticos. “Es un gran reto y tendremos que sentarnos a definir hacia dónde queremos transitar”, reflexiona.
🎶 Un legado que sigue creciendo
La ESM no solo ha sido testigo de la transformación de la educación musical en México, sino que también ha formado a generaciones de artistas que han llevado su talento a escenarios nacionales e internacionales. A 89 años de su fundación, sigue siendo un espacio donde la música, la pasión y el conocimiento se encuentran para crear nuevos caminos artísticos. 🎵✨