El miércoles 8 de octubre de 2003, María Lucila Acevedo encontró el cuerpo calcinado de Cynthia Alvarado en San Lorenzo Tepaltitlán, Estado de México. Pocos días después, en el barrio de Los Laureles, en la zona de Jilotzingo, la enfermera Ana Hernández escuchó unos lamentos que provenían de una casa abandonada. Al acercarse, descubrió a Martha Galván, de solo 13 años, moribunda. La niña le advirtió que huyera, pues los asesinos seguían en el lugar. Martha murió instantes después.

Poco después, mientras Verónica Flores celebraba con su familia en su casa, en la colonia CTM, escuchó unos sonidos extraños que venían de un terreno baldío a unos metros de su hogar. Al salir a investigar, ella y sus familiares descubrieron el cuerpo descompuesto de otra mujer llamada Leticia Romero; los ruidos que escuchaban provenían de perros que se daban un festín con la carne muerta.

Los inspectores Zapata y Moreira fueron los designados para levantar los tres cuerpos. Al principio, no les dieron mucha importancia; después de todo, en el Estado de México los asesinatos son parte del día a día. Sin embargo, conforme fueron recogiendo más víctimas, descubrieron que estaban frente al primer asesino serial moderno del Estado de México. Así inicia la búsqueda para localizar y atrapar al infame Chacal de Chimalhuacán, un hombre que aterrorizó a Neza y Chimalhuacán a principios del milenio.

¿Quieres conocer más sobre este caso? Entonces debes leer La Vulnerabilidad del Azar, la novela de Fernando Benavides basada en uno de los personajes más aterradores del siglo en el Estado de México; un caso que, aunque hoy está casi en el olvido, mantuvo en vela a gran parte de la población del oriente de la zona metropolitana. Una novela que combina la crónica policial y la ficción para crear una historia fluida que te atrapa desde las primeras páginas.

La Vulnerabilidad del Azar se aleja del género de misterio tradicional y explora todas las caras de un asesino en serie y la investigación que llevó a su captura. Benavides no solo retrata la brutalidad de los homicidios, el dolor de las familias y la impresión de quienes encontraron los cuerpos, sino también las preocupaciones de los investigadores y autoridades que se vieron envueltos en la cacería del Chacal. Todo esto lo hace mezclando realidad y ficción de una forma envolvente, llevándonos a querer conocer mejor el caso real que sacudió a Neza y Chimalhuacán.

Más que una historia de crímenes, esta novela es un reflejo de la violencia sistemática en México y de la indiferencia que muchas veces la rodea. Con un ritmo ágil y una narrativa atrapante, Benavides nos sumerge en un mundo donde la impunidad es parte del paisaje, pero también donde la búsqueda de justicia se convierte en una obsesión. La Vulnerabilidad del Azar no solo cuenta una historia, sino que nos confronta con una realidad incómoda: en un país donde la muerte acecha en cada esquina, la verdadera vulnerabilidad es la de quienes aún buscan respuestas.