El Metro Insurgentes es una de las estaciones más emblemáticas de la Línea 1 del Metro de la Ciudad de México, no solo por su ubicación estratégica, sino también por su profundo simbolismo histórico. Inaugurada el 4 de septiembre de 1969 por el entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz, esta estación marcó el inicio de una nueva era de movilidad para la capital mexicana. El ícono de la estación, una campana, rinde homenaje a la Campana de Dolores, utilizada por Miguel Hidalgo para convocar al levantamiento que inició la lucha por la Independencia de México el 16 de septiembre de 1810.

La estación Insurgentes toma su nombre de la Avenida de los Insurgentes, una de las arterias más importantes de la Ciudad de México, que cruza la ciudad de norte a sur. Esta avenida conecta al norte con el estado de Hidalgo y al sur con el estado de Morelos, siendo una vía clave para la movilidad de millones de personas. La palabra “insurgente” hace referencia a aquellos combatientes que lucharon contra el gobierno español durante la Guerra de Independencia, lo que da un significado patriótico y simbólico a esta estación.

La estación se encuentra en la Glorieta de Insurgentes, en el cruce de Avenida Insurgentes y Avenida Chapultepec, mucho más que una simple rotonda. Diseñada por Salvador Ortega y construida al mismo tiempo que la estación del metro, esta glorieta ha sido testigo de importantes transformaciones urbanas. En su centro se encuentra la estación de metro, cuya estructura cilíndrica está rodeada por una amplia zona peatonal y áreas verdes que invitan al descanso. A su alrededor, se despliegan una variedad de comercios, cafeterías y espacios culturales que han hecho de este lugar un punto de referencia para locales y turistas.

El Monumento al Sereno, ubicado en el centro de la glorieta, rinde homenaje al antiguo oficio de los serenos, quienes vigilaban las calles de la ciudad durante la noche. A lo largo de los años, la Glorieta de los Insurgentes se ha convertido en un espacio de convivencia cultural que conecta las colonias Roma y Juárez, albergando diversas expresiones artísticas y tribus urbanas. Incluso, esta glorieta fue escenario de una escena de la película Total Recall protagonizada por Arnold Schwarzenegger, lo que la colocó en el mapa internacional.

La estación Insurgentes también destaca por su riqueza artística. Entre sus murales se encuentran dos obras hiperrealistas del pintor Rafael Cauduro que retratan escenas del metro de Londres y París. Además, la obra El usuario de Marco Zamudio plasma la vida cotidiana de los pasajeros del metro, mientras que el mural En la mesa de los muralistas mexicanos del artista argentino Alfredo Segatori reúne a grandes figuras del arte mexicano como Siqueiros, Rivera, Orozco y Frida Kahlo, junto al propio autor.

A lo largo de las décadas, la Glorieta de los Insurgentes ha experimentado diversas transformaciones. Desde su papel como epicentro juvenil y cultural en los años 70, pasando por ser punto de reunión de tribus urbanas como los emos a finales de la década de 2000, hasta su remodelación en 2012, que modernizó el espacio e incorporó elementos publicitarios que evocan a Times Square o Shibuya. Hoy en día, sigue siendo un símbolo de dinamismo urbano, un punto de encuentro para la comunidad LGBT+, artistas, jóvenes y visitantes que encuentran en este lugar un espacio para la expresión y la convivencia.