Artesanas tradicionales de ambos países intercambian técnicas, historias y estrategias para fortalecer el arte textil y el bordado como herencia cultural y motor económico
El arte textil es mucho más que hilos y colores: es identidad, memoria y un legado vivo que conecta generaciones. Por eso, artesanas de México y Perú se dieron cita en el Museo de Arte de Lima para compartir experiencias, saberes y estrategias que fortalezcan su trabajo y mejoren sus condiciones de vida y las de sus comunidades. Esta reunión marca el inicio del Encuentro Binacional de Arte Textil, impulsado por la UNESCO en ambos países.
Cultura que transforma: mujeres tejedoras como agentes de cambio
En este primer encuentro participan 24 artesanas de Yucatán, México, y 63 creadoras textiles de Cajamarca, Ayacucho y Lima, en Perú. Durante las sesiones, abordan temas clave como la gestión comercial basada en el patrimonio cultural inmaterial, la organización comunitaria y la incorporación de innovaciones que fortalezcan su competitividad en el mercado, siempre con perspectiva de género.
Este espacio es mucho más que un intercambio técnico: es un reconocimiento al valor de las artesanías textiles como patrimonio vivo, donde cada puntada refleja la historia, cosmovisión y resistencia de comunidades indígenas y tradicionales. Además, el Encuentro Binacional de Arte Textil es una muestra de lo que la cooperación internacional puede lograr cuando se enfoca en fortalecer el patrimonio cultural y promover el desarrollo sostenible con identidad.
Tejiendo redes de apoyo entre México y Perú
El encuentro es parte de los proyectos que UNESCO desarrolla con apoyo de LATAM Airlines en Perú y la Fundación Banorte en México, en colaboración con el Ministerio de Cultura de Perú y la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta) del Gobierno de Yucatán. El objetivo es claro: que las artesanas no solo preserven su patrimonio, sino que también fortalezcan sus capacidades empresariales, aumenten sus ingresos y mejoren su calidad de vida.
Patrimonio vivo y economía creativa con rostro de mujer
Guiomar Alonso Cano, representante de UNESCO en Perú, destacó que la cultura es un motor de desarrollo que impulsa la identidad, la economía y la resiliencia de comunidades en países tan diversos como México y Perú. Por su parte, Cynthia Santoyo Robles, especialista en Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO México, subrayó que estos proyectos son clave para promover los derechos culturales, la organización comunitaria autónoma y la construcción de modelos económicos propios que respeten y preserven el patrimonio biocultural.
Un modelo de éxito que cruza fronteras
El impacto de estas iniciativas ya es visible en ambos países. En Perú, desde 2003 más de 60 artesanas de las asociaciones SISAN-Museo Pachacamac (Lima), Sunqu Suwa (Ayacucho) y San Miguel Arcángel (Cajamarca) han fortalecido sus habilidades en diseño, acabados, gestión comercial, ventas en línea y finanzas.
En México, más de 350 artesanas de comunidades mayas en 12 municipios de Yucatán han participado en programas que resaltan el valor de su trabajo como patrimonio vivo y elemento clave de cohesión social, además de mejorar sus capacidades empresariales y de gestión para impulsar sus ingresos y competitividad. Debido a su éxito, el programa se ha extendido a más de 20 municipios.
Próximos pasos: fortalecimiento binacional del sector textil
El siguiente capítulo de este encuentro binacional se escribirá en Yucatán durante marzo, donde las artesanas de ambos países trabajarán juntas para identificar fortalezas, retos y oportunidades del sector textil creativo. Con este diagnóstico, desarrollarán propuestas específicas para asegurar la sostenibilidad de este patrimonio y robustecer sus capacidades comerciales, todo desde una visión intercultural y de economía social y solidaria.