¿Quién dijo que la diplomacia era puro protocolo? También hay lugar para el cine, las exposiciones, el arte popular y hasta Mariana Yampolsky. En una videollamada con acento global, 119 representaciones de México en el extranjero se conectaron para echarle un vistazo a las posibilidades que ofrece nuestra cultura como embajadora estrella.

Este encuentro virtual, organizado por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), tuvo como coanfitriona a la Secretaría de Cultura. Fue una especie de taller turbo de ideas para llevar más arte, creatividad e identidad mexicana a todos los rincones del planeta. Porque si algo tenemos de sobra, es talento (y ganas de compartirlo).

La charla fue moderada por Alfonso Zegbe Camarena, de la SRE, y entre los ponentes hubo figuras clave como Marina Núñez Bespalova, subsecretaria de Desarrollo Cultural; Daniela Alatorre, directora del Imcine; Miguel Ángel Trinidad, del INAH, y Gerardo Cedillo Bolaños, del INBAL. Todos con el mismo objetivo: poner a México en el mapa mundial, pero con pinceles, cámaras y talento artesanal.

Marina Núñez lo explicó clarito: la cultura es diplomacia pura. Y las embajadas y consulados no solo pueden llevar tacos y mariachi (aunque también nos encanta), sino exposiciones, películas, piezas prehispánicas, arte popular y más. ¿Cómo? Usando materiales ya listos o armando curadurías especiales, con todo y moño para ser enviados al extranjero.

Un ejemplo de esto es la muestra de fotos de Mariana Yampolsky que el Centro de la Imagen tiene más que lista: 25 imágenes que retratan el alma de México entre los años 70 y 90, perfectas para conmover corazones en cualquier idioma.

Daniela Alatorre, por su parte, habló sobre cómo el cine mexicano ya no necesita avión: gracias a la tecnología, puede recorrer el mundo subtitulado en inglés y en lenguas indígenas, si hace falta. ¡Cine para exportar hay de sobra!

Miguel Ángel Trinidad compartió cómo el INAH hace magia colaborando con embajadas para mostrar nuestra historia por el mundo (y también traer joyitas a México, como la exposición “Amazônia” de Sebastião Salgado).

Y Gerardo Cedillo Bolaños recordó que el INBAL no solo guarda arte: lo comparte. Prueba de ello es la expo “José María Velasco: A View of Mexico”, que se está luciendo en la National Gallery de Londres. Nada mal para un pintor que empezó con volcanes.

¿La conclusión? Que cuando instituciones como estas se coordinan, México brilla más fuerte en el extranjero. Porque no hay mejor carta de presentación que la cultura: es nuestra forma más auténtica de decir “¡Hola, mundo!”.