Archivos de la categoría Sitios Turísticos

Antigua Escuela de Jurisprudencia, donde la historia y el derecho caminan juntos

En pleno corazón del Centro Histórico de la Ciudad de México, entre las calles República de Argentina y San Ildefonso, se alza un edificio con mucha historia y un aire de grandeza: la Antigua Escuela de Jurisprudencia. Este lugar, que alguna vez fue hogar de monjas dominicas y luego centro de formación de brillantes abogados, es ahora un rincón fascinante para explorar la historia de nuestra ciudad y su educación.

El edificio tiene raíces profundas que se remontan a 1593, cuando las hermanas Phelipas, tres visionarias oaxaqueñas, donaron su casa para fundar el Convento de Santa Catalina de Siena. Desde entonces, este lugar ha pasado por tantas transformaciones como leyes en los códigos jurídicos: de convento a cuartel militar, y finalmente, a un espacio educativo.

Fue en 1908 cuando el presidente Porfirio Díaz inauguró aquí la Escuela Nacional de Jurisprudencia, diseñada por el ingeniero Salvador Echegaray. Su arquitectura es todo un espectáculo: una mezcla de estilos eclécticos que combina columnas palladianas con frontones, interiores remodelados y un tercer piso añadido en el siglo XX.

Si te das una vuelta por este edificio, notarás que no sólo es un espacio lleno de historia jurídica, sino también un respiro en medio del bullicioso Centro Histórico. Gracias a la peatonalización de la calle San Ildefonso, el exterior del edificio tiene un aire de plaza pública, ideal para una pausa entre paseos.

A lo largo de los años, este lugar ha sido testigo de grandes cambios en la educación mexicana. Fue aquí donde, en 1929, las y los estudiantes lucharon por la autonomía de la Universidad Nacional de México (hoy UNAM). En 1954, la Escuela de Jurisprudencia se mudó a Ciudad Universitaria, pero el edificio siguió formando parte del patrimonio universitario.

Hoy, este espacio alberga la educación continua y servicios para exalumnos de la Facultad de Derecho de la UNAM. Incluso la Suprema Corte tiene una pequeña presencia aquí, dándole un toque contemporáneo a este lugar lleno de tradición.

Así que, si andas por el Centro Histórico y te topas con esta joya arquitectónica, no dudes en detenerte, admirar su fachada y recordar que, más allá de sus muros, se encuentran siglos de historias que marcaron el rumbo del derecho en México.

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Dirección:
 San Ildefonso #28, Centro Histórico, Ciudad de México, CDMX

Antiguo Colegio de San Gregorio, un testigo de la transformación del Centro Histórico

¡Bienvenidx al antiguo Colegio de San Gregorio, un rincón lleno de historia en el Centro Histórico de la Ciudad de México! Este lugar, que ha sido testigo de transformaciones asombrosas, es ahora sede de la Universidad Obrera “Vicente Lombardo Toledano”, pero su pasado tiene mucho que contar.

Originalmente fundado por los jesuitas, este colegio inició con un propósito noble: brindar educación a los indígenas. Desde su construcción en 1612, el edificio ha sido un emblema del esfuerzo educativo, pasando por etapas como seminario y centro de formación para jóvenes indígenas hasta finales del periodo colonial. Pero su historia no termina ahí.

En el siglo XIX, el colegio vivió una revolución. Bajo la dirección del reformador Juan Rodríguez Puebla, se transformó en un centro de aprendizaje moderno, con innovaciones como cátedras de agricultura, academias de música y literatura, ¡e incluso la primera clase de gimnasia en México! Grandes figuras como Benito Juárez y Francisco Zarco frecuentaron su biblioteca, considerada la mejor de su tiempo.

Con el tiempo, el edificio pasó por múltiples usos, desde Escuela Nacional de Agricultura y Veterinaria hasta Hemeroteca Nacional y hospital. Fue en 1964 cuando la Universidad Obrera de México lo adoptó como su hogar, continuando una tradición educativa que combina conocimientos laborales y comunitarios. Fundada en 1936 por el visionario Vicente Lombardo Toledano, esta universidad se dedica a formar líderes sindicales y trabajadores organizados.

Al visitar este recinto, te sorprenderá su cuidado patio central, con jardineras y una fuente que invita a la tranquilidad. Desde aquí, puedes disfrutar de una vista única de la majestuosa cúpula del Templo de Loreto, ¡la más grande del Centro Histórico! Además, sus bóvedas de tezontle albergan un acogedor comedor con comida casera, perfecto para recargar energías.

La biblioteca, inaugurada por Salvador Novo, guarda un tesoro de 15 mil volúmenes dedicados al movimiento obrero, y su archivo histórico conserva el legado de Lombardo Toledano. La cafetería El Linotipo, con su delicioso café y su máquina homónima como pieza central, es el broche de oro para una visita memorable.

La Universidad Obrera sigue siendo un espacio vivo, con talleres, conferencias, cine y debates que mantienen su espíritu combativo y comprometido. A pesar del caos del ambulantaje y el bullicio citadino, este lugar se alza como un oasis cultural que vale la pena descubrir.

Así que, ¿qué esperas para conocer este pedazo de historia? ¡Date una vuelte sé parte del legado del antiguo Colegio de San Gregorio, donde el pasado y el presente se encuentran para dar vida a un futuro más consciente y comprometido!

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Dirección:
 San Ildefonso #72, Centro Histórico, Ciudad de México, CDMX

Panteón 20 de Noviembre, historias, misterio y tradición en el centro de Tlalpan

En el extremo sur del Centro de Tlalpan, entre calles llenas de historia y encanto, se encuentra el Panteón 20 de Noviembre, un lugar que guarda más secretos que un buen libro de terror y más anécdotas que un abuelo en una reunión familiar. Este cementerio, que abrió sus puertas en 1875, es uno de los más antiguos de la Ciudad de México, y si sus tumbas hablaran, ¡vaya que tendrían mucho que contar!

Originalmente conocido como el Panteón del Niño Jesús, este camposanto surgió para reemplazar al antiguo cementerio del mismo nombre. Aunque comenzó a recibir enterramientos en 1875, no fue inaugurado oficialmente hasta 1905, cuando se dedicó su fachada y se formalizó como parte del paisaje tlalpense. Décadas más tarde, en 1935, adoptó su nombre actual en honor a la fecha que marcó el inicio de la Revolución Mexicana.

¿Eres fanáticx de las historias de fantasmas? Este panteón es para ti. Lxs cuentacuentos y exploradorxs de lo sobrenatural consideran el Panteón 20 de Noviembre un lugar legendario. Desde nieblas misteriosas que se transforman en figuras humanas hasta charlas con “visitantes” que después resultan ser… ¡fantasmas! Aquí hay material suficiente para cualquier noche de relatos espeluznantes.

Don Alfonso Haro, quien lleva más de 30 años cuidando este rincón histórico, tiene muchas historias que contar. Una de las más impactantes ocurrió en febrero de 2023, cuando saludó a un hombre junto a una tumba y, días después, descubrió que esa persona llevaba meses fallecida. “Platicamos, lo saludé, y cuando volví la vista… ya no estaba”, recuerda Don Alfonso con naturalidad.

Martín Sánchez, el actual velador, también ha sido testigo de lo inexplicable. Aunque asegura que ya no teme a los muertos, sí ha visto desaparecer figuras entre las tumbas tanto de día como de noche. ¿Lo más raro? Las ofrendas y objetos extraños que aparecen en el panteón, desde gallinas hasta frascos llenos de “cosas raras”. ¡Todo un misterio!

Más allá de los relatos paranormales, el Panteón 20 de Noviembre es un lugar lleno de vida… ¡en Día de Muertos, claro! Durante esta festividad, las familias se reúnen para honrar a sus seres queridos, con ofrendas llenas de flores de cempasúchil, veladoras y deliciosos platillos tradicionales. Es un espectáculo que combina tradición y cultura, enmarcado por la atmósfera única de este histórico camposanto.

Si visitas el Centro de Tlalpan, no olvides incluir este panteón en tu recorrido. Puedes combinarlo con una visita al Oratorio de Amaxalco o explorar las encantadoras calles del barrio. El Panteón 20 de Noviembre no es solo un lugar de descanso eterno; es un testigo silencioso de la historia de Tlalpan, un espacio para reflexionar y, por qué no, dejarte sorprender por algún misterio inesperado.

Así que, si estás listo para sumergirte en historias que combinan lo histórico con lo sobrenatural, ¡anímate a visitar este fascinante rincón de la Ciudad de México!

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Dirección:  
Calle San Marcos #2, Centro, Tlalpan, Ciudad de México, CDMX

Torre Virreyes, un ícono de la arquitectura mexicana contemporánea en Chapultepec

¿Sabías que la Torre Virreyes es mucho más que un rascacielos? Este edificio, también conocido como Torre Pedregal 24 o el Dorito, se alza majestuosamente en la zona de Lomas de Chapultepec, junto al Bosque de Chapultepec y el Parque de la Luz. Diseñada por el célebre arquitecto Teodoro González de León, es una obra que redefine el panorama urbano de la Ciudad de México con su audaz diseño y compromiso con la sustentabilidad.

Con una altura de 121 metros y 28 pisos, la Torre Virreyes no es solo imponente, sino también innovadora. Su estructura parece expandirse conforme asciende, creando una silueta única que desafía la gravedad. Este diseño espectacular integra la icónica obra Super Servicio Lomas de Vladimir Kaspé, catalogada como Monumento Artístico por el INBA, logrando un diálogo entre pasado y presente arquitectónico.

El interior no se queda atrás. Desde su impresionante vestíbulo de 50 metros sin columnas, soportado por un megabrazo estructural, hasta los amplios espacios libres y patios escalonados en los últimos niveles, cada detalle fue pensado para ofrecer funcionalidad, estética y comodidad.

La Torre Virreyes no solo se preocupa por la belleza arquitectónica, también está comprometida con el medio ambiente. Gracias a sus paneles solares y un sistema de reutilización de agua de lluvia, este edificio ha obtenido la certificación LEED Platino, una de las más altas en sustentabilidad. Además, los desarrolladores llevaron a cabo una rehabilitación del parque colindante y su carril para bicicletas, convirtiéndolo en un espacio más atractivo para la comunidad.

Este lugar no es solo para quienes trabajan en sus oficinas. La planta baja es un espacio abierto con tiendas, restaurantes y un auditorio perfecto para reuniones o simplemente para disfrutar de un buen rato. Además, su integración con el arte no pasa desapercibida gracias a Los Gigantes de Piedra, una obra del artista suizo Ugo Rondinone, que embellece el área pública.

Teodoro González de León, el genio detrás de esta obra, diseñó la Torre Virreyes como una culminación de su carrera y un símbolo de la arquitectura contemporánea mexicana. Este proyecto, finalista en el concurso internacional del Council on Tall Buildings and Urban Habitat en 2015, no solo se alza como un ícono arquitectónico, sino también como un espacio donde convergen modernidad, funcionalidad y responsabilidad ambiental.

Si buscas un ejemplo de cómo la arquitectura puede transformar una ciudad, la Torre Virreyes es una parada obligada en el corazón de Chapultepec.

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Dirección: 
Pedregal #24 , Lomas de Chapultepec, Ciudad de México, CDMX

Instituto Mier y Pesado, un impresionante rincón Art Déco que brilla en Calzada de Guadalupe

Si alguna vez has paseado por la Calzada de Guadalupe y te has topado con un imponente edificio que ocupa toda una manzana, ¡felicidades! Has descubierto el Instituto Mier y Pesado, un tesoro arquitectónico que combina historia, elegancia y un toque de nostalgia. Aunque no se puede visitar por dentro, su majestuoso diseño Art Déco merece ser admirado desde cualquier ángulo.

¿Sabías que todo comenzó con la visión de Doña Isabel Pesado de la Llave, mejor conocida como la Duquesa de Mier? En su testamento de 1917, dejó claro su deseo de crear un legado educativo que beneficiara a las más necesitadas. Su fundación no solo creó este colegio, sino también el icónico Edificio Ermita en Tacubaya, una joya de la arquitectura en la Ciudad de México. Los restos de la duquesa y su familia descansan en la antigua Basílica de Guadalupe, cerrando un círculo de historia y devoción en la zona.

El Instituto abrió sus puertas en 1932, originalmente como orfanato para niñas. Su diseño fue encargado a los arquitectos Manuel Cortina García y Juan Segura, quienes crearon un edificio que parece sacado de una película de época. Hablando de películas, si su fachada te resulta familiar, no es casualidad: ha sido escenario de múltiples producciones de cine y televisión, gracias a su estilo inconfundible.

A lo largo de los años, el edificio ha cambiado su función, pasando de orfanato a internado y, finalmente, a escuela femenina. Pero algo que se ha mantenido intacto es su misión de educar y su carácter exclusivo para niñas, que lo distingue de otros colegios de la ciudad.

Este ícono Art Déco no solo es un referente arquitectónico, sino también un punto de identidad para las colonias Industrial y Estrella. Desde cualquier perspectiva, su fachada es simplemente espectacular, con líneas elegantes que narran casi un siglo de historia.

Así que, la próxima vez que recorras la Calzada de Guadalupe o la Calzada de los Misterios, tómate un momento para detenerte y admirar este edificio que, aunque no puedes explorar por dentro, invita a soñar con su pasado y su legado. El Instituto Mier y Pesado es más que un colegio: es un recordatorio vivo de cómo la educación y el arte pueden unirse para crear algo verdaderamente eterno.

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Dirección: 
Calz de Guadalupe #540, Colonia Industrial, Ciudad de México, CDMX

Hotel Camino Real Polanco, un museo viviente junto al Bosque de Chapultepec

En el corazón de la Ciudad de México, este hotel-museo es una joya arquitectónica y cultural que ha sido testigo de momentos históricos desde su apertura en 1968, justo a tiempo para los Juegos Olímpicos. Diseñado por el talentoso Ricardo Legorreta, con la colaboración de los icónicos Matías Goeritz y Luis Barragán, este lugar no es solo un hotel, ¡es una obra de arte viviente!

Desde el momento en que cruzas su distintiva arcada amarilla, sientes que te adentras en un oasis. Sus espacios amplios, llenos de luz y color, están decorados con obras de grandes artistas como Rufino Tamayo, Alexander Calder y Pedro Friedeberg. Y si creías que eso era todo, no puedes perderte la Fuente del Eterno Movimiento de Isamu Noguchi, un espectáculo en sí misma.

Legorreta desafió la tradición al crear un edificio de baja altura que dialoga con la esencia de México. Aquí, el rosa mexicano de Goeritz se encuentra con los muros amarillos de Legorreta, creando un entorno que combina modernidad y calidez.

A pocos pasos de Polanco y Chapultepec, el Camino Real Polanco es perfecto para explorar la ciudad. Visita el Bosque de Chapultepec, el Museo Nacional de Antropología o el Museo Rufino Tamayo. Y después de un día lleno de aventuras, vuelve al hotel para relajarte en su alberca rodeada de jardines.

Con 714 habitaciones, múltiples restaurantes de clase mundial y espacios ideales para eventos, este lugar tiene todo lo que necesitas para una experiencia inolvidable. Además, su diseño lo hace único, ideal tanto para viajerxs como para amantes del arte y la arquitectura.

Ven y vive el lujo, la historia y el arte en el Hotel Camino Real Polanco, donde cada rincón cuenta una historia y cada detalle celebra la belleza de México.

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Dirección: 
Calz. Gral. Mariano Escobedo #700, Colonia Anzures, Ciudad de México, CDMX

Casa Gilardi, un viaje de luz, color y diseño de la mente de Luis Barragán en San Miguel Chapultepec

¿Te imaginas caminar por una casa donde cada rincón es una obra de arte y cada rayo de luz parece pintado a mano? Eso es la Casa Gilardi, una joya arquitectónica diseñada por el legendario Luis Barragán, ubicada en la colonia San Miguel Chapultepec de la Ciudad de México. Este lugar no solo es un testimonio del genio de Barragán, sino una experiencia sensorial que transforma nuestra percepción del espacio, el color y la luz.

Construida entre 1976 y 1977 para la familia Gilardi, esta residencia privada es la última obra maestra de Barragán y una de las pocas que puedes visitar con previa cita. Su diseño celebra la simplicidad, pero con un toque mágico: un pasillo sencillo que te lleva a descubrir poco a poco un universo de colores vibrantes, texturas únicas y espacios llenos de luz.

El corazón de la casa es, sin duda, la icónica piscina interior, ubicada en la zona de estar y comedor. Este espacio es un poema visual: un muro rosa que parece emerger del agua, un tragaluz que baña todo con luz natural cambiante y una geometría que dialoga entre lo sólido y lo líquido. Es un sitio que te hace preguntarte: ¿por qué no todas las casas son así?

Además, la experiencia de recorrer la Casa Gilardi es como abrir un regalo cuidadosamente envuelto. Desde la escalera sin barandal que parece flotar bajo una luz cenital hasta el corredor iluminado por cristales de ónix amarillo, cada paso está diseñado para asombrarte.

Aunque la casa sigue siendo una residencia privada, puedes agendar tu visita a través de su sitio web. ¡Ojo! Las citas se agotan rápido, así que planea con tiempo. Y recuerda, más que un recorrido arquitectónico, visitar la Casa Gilardi es un viaje emocional que te hará sentir el arte en cada rincón.

¿Listx para descubrir por qué esta casa es una de las más importantes de la Ciudad de México? ¡Haz tu cita y prepárate para una experiencia inolvidable!

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Dirección: 
Calle Gral. Antonio León #82, San Miguel Chapultepec I Secc, Ciudad de México, CDMX

Todas las imágenes fueron tomadas de Google

Templo a San Juan Diego, entre historias y las ruinas del legendario Cine Lindavista

A la sombra de la Basílica de Guadalupe, en la colonia Tepeyac Insurgentes, yace un lugar tan cargado de historia como de curiosidades: el futuro Templo a San Juan Diego Cuauhtlatoatzin. Aunque, siendo sincerxs, por ahora es más una ruina que un santuario. Pero, ¡qué ruina tan intrigante!

Primero, un poco de contexto. Juan Diego Cuauhtlatoatzin, conocido como “el que habla como un águila”, fue testigo de las apariciones de la Virgen de Guadalupe en 1531. Su legado es tan significativo que en 2002 el Papa Juan Pablo II lo canonizó como el primer santo indígena de América. Con esta canonización llegó el sueño de construirle un templo en su honor, pero aquí es donde la historia toma un giro inesperado.

El terreno elegido no es cualquier lugar. Antaño, fue el famoso Cine Lindavista, diseñado por Charles Lee, un arquitecto estrella de la Edad de Oro del Cine, quien diseñó varios de los cines, teatros y hoteles más icónicos de Los Ángeles. Este cine, con su diseño que recordaba un castillo y sus personajes de Disney decorando las paredes, fue el epicentro de tardes mágicas para las y los vecinos de la zona. Pero como toda buena película, tuvo un final: cerró sus puertas en los años 90, dando paso a la idea de convertirlo en un santuario.

Santuario Provisional Anexo

En 2003 se colocó la primera piedra del templo, pero desde entonces, la construcción quedó a medias. Hoy, el lugar es un mosaico de contrastes: las cúpulas y la fachada prometen grandeza, mientras que los muros sin terminar y la basura cuentan una historia de abandono. Lxs vecinxs, que llevan años lidiando con problemas de seguridad e higiene, sueñan con ver el proyecto finalizado o, al menos, con que la zona recupere la paz.

Sin embargo, la historia del templo aún no termina. Aunque ahora sea un lugar que evoca más preguntas que respuestas, sigue siendo un símbolo del legado de San Juan Diego y de su papel en la devoción guadalupana. Además, para quienes aman las historias que mezclan cine, religión y arquitectura, este lugar es un recordatorio de que la Ciudad de México nunca deja de sorprendernos.

Quizá algún día, el Templo a San Juan Diego será el espacio de oración y reflexión que se soñó. Mientras tanto, sigue siendo un rincón fascinante que invita a reflexionar sobre nuestra historia, nuestras promesas sin cumplir y nuestro deseo constante de encontrar belleza incluso en el abandono.

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Dirección: 
Av. Insurgentes Nte. esquina con Montevideo, Tepeyac Insurgentes, Ciudad de México, CDMX

Edificio La Mexicana, un ícono arquitectónico en el corazón de la CDMX

Ubicado en la vibrante esquina de Madero e Isabel La Católica, el Edificio La Mexicana es una joya arquitectónica que guarda más de un siglo de historias entre sus muros. Este emblemático edificio, diseñado por el ingeniero Genaro Alcorta, abrió sus puertas en 1906 como la primera sede de la Compañía de Seguros La Mexicana, marcando un hito en la arquitectura de la Ciudad de México con su innovadora estructura de acero.

Antes de que el edificio se erigiera, el solar albergaba al famoso Café La Concordia, un punto de encuentro para los intelectuales del siglo XIX. Allí, escritores, periodistas y artistas debatían apasionadamente entre tazas de café, aunque con el tiempo el lugar perdió su prestigio, cediendo espacio a personajes menos ilustres como buscadores de broncas, toreros y mujeres de la vida nocturna. El café fue demolido para dar paso a un nuevo capítulo en la historia del sitio: la construcción de un edificio que se convertiría en un ícono.

Con un diseño que combina elegancia y funcionalidad, el Edificio La Mexicana destaca por sus líneas verticales que aligeran su apariencia y guían la mirada hacia su cima. Entre los elementos más distintivos se encuentra un reloj y una escultura en su remate superior, que evocan la grandiosidad de los pabellones de las ferias universales. Sus ventanales, que se extienden sin interrupción entre el segundo y el tercer piso, fueron un toque innovador para su época.

Hoy en día, este tesoro arquitectónico del Centro Histórico alberga una sucursal de la famosa tienda de moda Zara, ocupando tres de sus plantas. A pesar de la modernidad que trae consigo este inquilino, el edificio sigue siendo un recordatorio del esplendor de principios del siglo XX, justo frente a la histórica Iglesia de la Profesa.

Si paseas por Madero, tómate un momento para admirar este edificio que ha sido testigo de la evolución de la ciudad. Desde los días del Café La Concordia hasta su papel actual como un referente comercial, La Mexicana es un claro ejemplo de cómo el pasado y el presente conviven en armonía en el corazón de la Ciudad de México. ¡No olvides mirar hacia arriba y dejarte maravillar por su diseño!

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Dirección:  
Isabel La Católica #24, Centro Histórico, Ciudad de México, CDMX

Monumento a José Guadalupe Posada, un tributo al caricaturista que marcó la cultura mexicana en Chapultepec

Ubicado al final de la Calzada de los Poetas, en el hermoso Bosque de Chapultepec, el Monumento a José Guadalupe Posada es un homenaje vibrante a uno de los artistas más importantes de México. Este busto, aunque algo discreto, se alza sobre un pedestal de piedra, como recordatorio de la huella que dejó Posada en el arte mexicano y en la cultura popular global.

José Guadalupe Posada (1852-1913) es reconocido principalmente por haber creado a La Catrina, esa icónica figura esquelética que hoy en día simboliza el Día de Muertos, un elemento central de nuestras tradiciones. Pero su legado va más allá de esa calavera elegante; Posada revolucionó la caricatura, el grabado y la ilustración en México, creando un universo visual lleno de crítica social, sátira política y, sobre todo, un profundo sentido de identidad cultural.

A pesar de que su obra pasó desapercibida durante su vida, hoy la celebramos como uno de los pilares más importantes del arte mexicano. Diego Rivera, Frida Kahlo y José Clemente Orozco reconocieron su impacto, y su influencia se deja ver en obras tan monumentales como el mural de Rivera en el Museo Mural Diego Rivera. La estatua, obra del escultor Francisco Zúñiga, rinde un justo tributo a su talento y visión.

Este monumento se encuentra justo en el cruce con el Paseo del Quijote, en un entorno ideal para reflexionar sobre la magnitud de su legado y la importancia de seguir celebrando y preservando nuestras tradiciones. ¡Una parada obligada para las y los amantes de la historia, el arte y la cultura mexicana!

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Dirección: 
Bosque de Chapultepec Secc I, Ciudad de México, CDMX