Casa del Poeta Ramón López-Velarde, un viaje por la poesía y literatura de principios de siglo XX

¿Te suena el nombre de Ramón López-Velarde? Si no estás muy interesadx en la literatura o la poesía mexicana es probable que nunca hayas escuchado hablar de él, pero debes saber que, hoy en día, es considerado uno de los más grandes poetas del México del siglo XX. Y, de hecho, es muy probable que te haya tocado escuchar o recitar uno de sus poemas en tu primaria; me refiero, claramente, al poema de Suave Patria: Suave Patria: tu casa todavía es tan grande, que el tren va por la vía como aguinaldo de juguetería.

¿Quién fue Ramón López-Velarde? Nació el 15 de junio de 1888 en Jerez de García Salinas, en Zacatecas. Al cumplir doce años lo mandaron a estudiar al Seminario de Zacatecas y después al de Aguascalientes, pero terminó abandonando su futuro como sacerdote para convertirse en abogado. En aquél entonces conoció a Josefa de los Ríos, pariente lejana y ocho años mayor que él, a quien le escribió su primer poema llamado Fuensanta. En 1906 empezó a colaborar con la revista Bohemio de Aguascalientes y para 1908 empezó sus estudios de Leyes en San Luis Potosí. En ese entonces se empapó de temas políticos, lo que lo llevó a apoyar abiertamente las reformas de Francisco I. Madero, con quien entabló una buena amistad.

En 1911, después de obtener su título de abogado, viajó a la Ciudad de México pensando que el presidente Madero le otorgaría un puesto político, pero no fue así. Sin embargo, empezó a colaborar con el diario católico La Nación (que criticaba abiertamente a Madero), escribiendo poemas, reseñas y artículos políticos. Poco a poco, Ramón López-Velarde fue ganándose el respeto de los intelectuales de la época, llegando a ser reconocido por el mismísimo Vasconcelos (mayor impulsor de la cultura mexicana en su época); y, tras su muerte, José Vasconcelos se encargó de consagrarlo como el poeta de la nueva mexicanidad nacida de la Revolución, enalteciendo principalmente su poema de Suave Patria.

El punto es que, sus últimos tres años de vida los pasó en un conjunto habitación que se construyó durante el porfiriato sobre lo que hoy es Álvaro Obregón, en la Colonia Roma. En aquél entonces, la Roma era una de las zonas más importantes de la Ciudad; sin embargo, con el paso de los años, la colonia empezó a decaer y decaer, lo que llevó a que muchas de las casas y edificios de la zona quedaran en el abandono total. Es por eso que, para 1980, se tenían los planes de demoler esa casa donde vivió el poeta. Sin embargo, en 1981, el gobierno de Zacatecas logró que se el INAH la declarara monumento histórico-artístico y colocó una placa para conmemorar los 50 años de la muerte de Velarde.

Y, para 1989, el gobierno del Distrito Federal adquirió la casa y la remodeló para crear la Casa del Poeta Ramón López-Velarde. El Museo Ramón López-Velarde, como se le conoce comúnmente a este lugar, cuenta con una pequeña colección de libros, fotografías y objetos relacionados a la vida y obra del poeta zacatecano. Además, al recorrer los espacios que pertenecieron al escritor podrás encontrarte con un curioso pasadizo secreto. Por si fuera poco, en la Casa del Poeta Ramón López-Velarde también te encontrarás con las bibliotecas Salvador Novo y Efraín Huerta.

Visitar la Casa del Poeta Ramón López-Velarde es una oportunidad para conocer la vida y obra de uno de los poetas más importantes de México; es un museo que te llevará a viajar en el tiempo para conocer el México de la Revolución y entender cómo se dio la creación de la “mexicaneidadposrevolucionaria. Además, una vez ahí, puedes darte una vuelta por el Jardín Ramón López-Velarde, un espacio en el que solía pasear el poeta y que, antes de que se construyera la Roma, era un cementerio.

P.D.: Si quieres visitar la tumba de Ramón López-Velarde, puedes hacerlo en la Rotonda de las Personas Ilustres.

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Dirección:
 Álvaro Obregón #73, Colonia Roma, Ciudad de México, CDMX
Costo por persona: $5 pesos
Horario: Martes a viernes de 10:00 a 18:00 hrs. y sábados de 10:00 a 15:00 hrs.
Página Web: casadelpoeta.com.mx
Facebook: facebook.com/casadelpoetaiap
Instagram: instagram.com/casa_delpoeta
TikTok: tiktok.com/@casa_delpoeta
Twitter: x.com/casadelpoetarlv

Museo de Ripley, un paseo por lo increíble en la Colonia Juárez

LeRoy Robert Ripley inició su carrera a los 16 años trabajando como caricaturista deportivo para varios periódicos neoyorkinos. Un día de diciembre de 1918, mientras dibujaba caricaturas para The New York Glove creó una caricatura titulada “Belive it or Not” (frase que solemos traducir como “¡Aunque Usted no lo crea!“). Lxs lectorxs recibieron esta caricatura con mucho interés, por lo que el periódico le pidió a Robert que dibujara una caricatura semanal sobre ese tema. Unos años después, para 1922, el monero realizó un viaja por el mundo, registrando todos los lugares y culturas exóticas que se encontraba, y publicando al respecto en el periódico, posicionándose como el reportero de lo increíble.

La fama de Ripley fue tal, que durante los años 30, a pesar de la Gran Depresión, ganó más de medio millón de dólares con sus caricaturas y reportajes. Y, para 1933, el periodista creó el primer Odditorium (literalmente: auditorio de lo raro) convirtiéndose en el primer Museo de Ripley’s ¡Aunque Usted no lo Crea! El éxito de este lugar fue inmediato, lo que le permitió abrir más Odditoriums en San Diego, Dallas, Cleveland, San Francisco y la ciudad de Nueva York. Con réplicas, ilustraciones, fotografías e instalaciones Ripley exhibía todas las curiosidades extrañas, hermosas y shockeantes con las que se encontraba en sus viajes; creando una experiencia llamativa, divertida y educativa.

Y, aunque usted no lo crea en México contamos con cuatro de los veintisiete museos de lo extraño (Odditorium) que el señor Ripley abrió en todo el mundo. Desde 1992, un curioso castillo ubicado en las calles de la Colonia Juárez, justo a un lado de lo que fuera la Hacienda de la Teja, es la sede del primer Museo de Ripley del país. Un museo que, desde hace más de treinta años a fascinado a chicxs y grandes con sus réplicas e instalaciones en las que se muestran los objetos y personas más extrañas de nuestro mundo.

Al recorrer las nueve salas del Museo de Ripley (Odditorium o Museo de lo Extraño), podrás conocer al hombre del millón, una escultura de tamaño real hecha con pedazos de billetes que valen un millón de dólares; la rueda más grande del mundo, que mide unos 4 metros de diámetro; al chimpancé mutante, que se encontró en África Occidental; a Alypius, que fue un hombre que midió 43 centímetros de altura; a las Mujeres de Paduand de Burma, quienes se alargan el cuello con unos anillos; y al hombre y mujer más gordxs del mundo. También podrás ver una recreación de la Última Cena, ver cabezas reducidad y todo tipo de curiosidades.

El Museo de Ripley de la Ciudad de México es un lugar único en nuestra caótica ciudad; un lugar en el que podrás divertirte mientras descubres datos curiosos sobre todo tipo de culturas, lugares y personas en todo el mundo.

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Dirección:
 Londres #4, Colonia Juárez, Ciudad de México, CDMX
Costo por persona: Entrada Libre
Horario: Lunes a domingo de 11:00 a 19:00 hrs.
Página Web: museodecera.com.mx
Instagram: instagram.com/museodecera
Facebook: https://www.facebook.com/MuseodeCeraOficial
TikTok: tiktok.com/@museodecera

El Doctor del Dr. Atl, retrato de una amistad en el Museo Kaluz

No cabe duda de que Gerardo Murillo Coronado, mejor conocido como Dr. Atl, es uno de los personajes más interesantes dentro del mundo político y artístico del México del siglo XX. Esto lo digo, porque el Dr. Atl fue un hombre rebelde y siempre se interesó por el bien común. Esto lo llevó a rechazar el régimen porfirista y después unirse a las filas de Venustiano Carranza y Emiliano Zapata para luchar contra la traición de Victoriano Huerta. Tras la victoria de Carranza, fue director de la Escuela Nacional de Bellas Artes y se mantuvo en este puesto hasta que murió el entonces presidente de México.

Pero eso no es todo, también se interesó ampliamente en la filosofía, la historia, el ensayo y el periodismo; pero su más grande pasión, junto al arte, fue la geología, y en especial la vulcanología. Esta pasión fue la que lo llevó a escalar y explorar las diferentes montañas y volcanes de México y retratarlas de una forma única en sus pinturas. Por lo mismo, al enterarse que estaba surgiendo un volcán en Michoacán, el Paricutín, el Dr. Atl decidió que tenía que ir a explorarlo y documentar su nacimiento. Sin embargo, con todos los años de senderismo, una trombosis en la pierna derecha le desató una gangrena y tuvieron que amputarla.

El encargado de tratar la enfermedad y amputación del Dr. Atl fue el Doctor José Palacios Macedo. Pero José Palacio no solo fue el médico de cabecera de Murillo, sino que también se convirtió en uno de sus amigos más cercanos, con quien podía pasar horas hablando de todos los temas que le apasionaban. Durante esos años de amistad, el artista le envió un sinfín de cartas y regaló un gran número de pinturas. Y, para que podamos conocer más a fondo la amistad entre ambos doctores, el Museo Kaluz presenta la exposición El Doctor del Dr. Atl, una pequeña muestra en la que se retrata esta amistad.

En El Doctor del Dr. Atl podrás encontrarte con una pequeña colección de los cuadros que el artista le regaló a su doctor, así como algunas cartas que envió y fotografías en las que salen ambos personajes. También podrás apreciar algunas de las caricaturas que les realizó Ernesto García “el Chango” Cabral, amigo cercano de ambos, y una pequeña réplica del mural El árbol del bien y el mal que este pintó en que pintó en el restaurante-hotel L’Escargot; mural en el que aparecen los doctores junto a otros personajes como Agustín Lara, María Félix y Cantinflas, entre otros. Además, la exposición presenta un video donde aparece el mismísimo Dr. Atl, así como un espacio de lectura donde podrás conocer más sobre este artista. Aunque es una exposición pequeña y sencilla, es una interesante propuesta que te permite conocer mejor la vida y obra del Dr. Atl desde un punto de vista muy diferente y humano.

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Vigencia: Hasta el 12 de agosto del 2024
Dirección:
 Hidalgo #85, Centro Histórico, Ciudad de México, CDMX
Costo por persona: $60 pesos
Horario: Miércoles a lunes de 10:00 a 18:00 hrsl.
Página Web: museokaluz.org
Instagram: instagram.com/museokaluz
Facebook: facebook.com/MuseoKaluz
Twitter: x.com/MuseoKaluz
TikTok: tiktok.com/@museokaluz
Youtube: youtube.com/c/MuseoKaluz/videos

Pozolería Flor de Maíz, un rincón de antojitos mexicanos en CDMX

Tuve una junta en la Colonia Álamos y, como llevaba un antojo de pozole que no podía con él, decidí preguntarle a mis colegas de la oficina dónde podía encontrar un buen pozole. Sin pensarlo dos veces, todos me recomendaron la Pozolería Flor de Maíz. Resulta que esta joyita tiene varias sucursales al sur y oriente de la CDMX: Narvarte, Progreso del Sur, Sector Popular, Viaducto Piedad, Lomas Estrella, Agrícola Oriental, y más.

La sucursal de Viaducto Piedad nos quedaba cerquita, así que cruzamos Tlalpan y caminamos hasta llegar a la Pozolería Flor de Maíz. Al llegar, nos recibió un restaurante sencillo, con ese aroma delicioso a pozole que te hace agua la boca. Nos sentamos y enseguida nos trajeron un enorme plato con cebolla, lechuga, rábano y limón, además de un tazón lleno de tostadas y chicharrón. También nos entregaron una comanda con todos los platillos que sirven.

En Pozolería Flor de Maíz, como su nombre lo dice, el pozole es la estrella. Tienen Pozole Blanco y Pozole Norteño, y de viernes a domingo también sirven Pozole de Camarón. Pero eso no es todo, también tienen Pancita, Tostadas y Chalupitas que puedes pedir con Pollo, Tinga o Maciza. Y si quieres algo más contundente, también tienen Alambres, Chilaquiles, Enchiladas, Enmoladas, Tacos y algunos Cortes de Carne al Carbón. ¡Hay opciones para todos los gustos!

Ya me habían advertido que las porciones son gigantes, así que me pedí un Pozole Chico y una Tostada de Tinga. ¡Aun así, fue mucha comida para mí! Mi colega pidió las Enmoladas con Pollo y, no les miento, también estaban enormes. Eso sí, todo estaba delicioso, bien servido y acompañado de tostadas, crema y chicharrón.

Para acompañar nuestro festín, pedimos dos aguas de Jamaica grandes. ¡Resultaron ser aguas de 1 litro! Pero no te preocupes si no te gusta la Jamaica, en la Pozolería Flor de Maíz también tienen agua de horchata, agua de temporada, refrescos de Coca-Cola y cervezas Negra Modelo, Victoria y Corona. Y para rematar, si todavía te queda espacio, puedes pedir una Jericalla, un Flan Napolitano o un Arroz con Tres Leches.

La Pozolería Flor de Maíz es uno de esos lugares donde sales con la barriga llena, el corazón contento y la cartera casi intacta. Un restaurante donde lo que más importa es que disfrutes de una deliciosa comida mexicana a precios súper accesibles. Sin duda, un paraíso para todxs lxs que viven o trabajan cerca de alguna de sus sucursales.

mo y de a cuánto?
Costo por persona: De $100 a $150 pesos

Sucursal Progreso del Sur
Dirección: Campesinos 292, Progreso del Sur
Sucursal Narvarte
Dirección: Uxmal 78, Narvarte Poniente
Sucursal Sector Popular
Dirección: Av. Agustín Yañez 1103, Sector Popular
Sucursal Viaducto Piedad
Dirección: Calle José Antonio Torres 804, Viaducto Piedad
Sucursal Zacahuitzco
Dirección: Presidente Plutarco Elías Calles 1419, Benito Juárez, Zacahuitzco
Sucursal Agrícola Oriental
Dirección: Oriente 253, Agrícola Oriental
Sucursal Arboledas del Sur
Dirección: Av de las Torres 92, Coapa, Arboledas del Sur
Sucursal Tlahuac
Dirección: Av. Tlahuac 4698-C, Santa Ana Sur 
Sucursal Lomas Estrella
Dirección: Morelos 29, Lomas Estrella 2da Secc
Sucursal Romero Rubio
Dirección: Marruecos 78, Romero Rubio 
Sucursal Xaltocan
Dirección: Calle Lirio Acuático 25, Xaltocan
 

Flautas Las Kenas, antojitos mexicanos en Tizapán

¿Vives o trabajas por Tizapán? Hace unos meses ni se me hubiera pasado por la cabeza que en esta zona podría encontrar comida buena, bonita y barata. Sabía de los restaurantes en Plaza Escenaria y algunos más elegantes por ahí, pero no tenía idea de que hubiera algo más accesible. Hasta que, gracias a mis compas de las oficinas de la zona, descubrí Flautas Las Kenas, un rinconcito de Flautas, Quesadillas y otros antojitos mexicanos.

En la calle Iglesia, casi esquina con Río de la Magdalena, justo frente al Hospital Gineco-obstetricia Número 4, hay varios changarros de comida. Flautas Las Kenas es el último antes del Superama, al ladito de La Michoacana. Es un local pequeñito, con solo tres mesitas afuera y un par de barras largas adentro. Su sencillez es su encanto, siendo el más pequeño pero también el más acogedor.

La carta es igual de sencilla pero deliciosa. Aquí encontrarás Flautas bien bañadas en salsa roja o verde de Queso, Frijoles, Barbacoa, Pollo y Res. También tienen algunas Quesadillas con diferentes rellenos, Caldo de Pollo con Pechuga, Pierna o Mollejas, y Arroz, con o sin huevo. Para beber, tienen las clásicas Aguas Frescas de Jamaica y Horchata, y refrescos de lata o en botella de vidrio. Nada más, nada menos.

Flautas Las Kenas es ese lugar barato donde puedes comer rico sin gastar mucho. Es una pequeña fondita, por así decirlo, donde los y las oficinistas y vecinxs pueden disfrutar de un buen antojito por unos cuantos pesos. Sin duda, una excelente opción para cuando la quincena ya está en las últimas.

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Dirección: Calle Iglesia s/n (esquina Río Magdalena), Tizapán San Ángel, Progreso Tizapán, Ciudad de México, CDMX
Costo por persona: De $100 a $150 pesos

Costra, un paraíso de pan en la Narvarte

¡Ey, panlover de la CDMX! Déjame contarte de Costra, un lugar hecho para quienes de verdad aman el buen pan. ¿Por qué? Porque aquí no se andan con tonterías y hacen su pan con Masa Madre, nada de levaduras artificiales. ¿Masa Madre? Sí, es como el Venom del pan, un cultivo simbiótico de levaduras naturales que están en la harina y otros alimentos. Imagina un yogurt, pero de harina. ¡Así de cool!

Los panes hechos con Masa Madre tienen un toque especial: son un poco más ácidos, con migajón más chicloso y una corteza bien crujiente. Pero claro, hacer pan con Masa Madre toma tiempo y esfuerzo, por eso muchas panaderías optan por levaduras artificiales para abaratar costos. ¡Pero no en Costra! Aquí se toman su tiempo para darte lo mejor.

Si todo esto no te convence para ir corriendo a Costra en la Narvarte, espera a que te cuente qué delicias tienen. Empezando por los panes salados: Baguette, Pan de Centeno, Pan de Cereales y Pan Campesino. Y para lxs que tienen un diente dulce, sus Cruasanes (así se dice Croissant en español, ¡gracias RAE!) son la estrella del show. Tienen Cruasanes de todo tipo, pero los de Pie de Limón y Nutella son los que más roban miradas.

¿Quieres más? ¡Claro que hay más! Tienen pasteles y tartas individuales de Chocolate, Maracuyá, Fresa y Zanahoria. También hay Pastelillos de Limón, Cubiletes de Piña con Queso, Panqués de Nuez, Rolles de Canela y Conchas. ¡Una fiesta para tu paladar!

Pero eso no es todo. En Costra también te preparan Bocadillos con sus panes salados. Mis favoritos son el Bocadillo de Cuatro Quesos y el de Jamón Serrano. Puedes pasar por tu pan y bocadillos para llevar, o quedarte, pedir un pan dulce y un cafecito o de la casa, mientras disfrutas de un libro, trabajas o echas chisme con tus amigxs.

En medio de tanta competencia, Costra destaca gracias a la calidad de sus panes y el toque especial del chef Éric Magaña. Sin duda, es un paraíso para lxs amantes del pan y para quienes buscan un lugar acogedor donde disfrutar algo delicioso. ¡Así que ya sabes, lánzate a Costra y déjate llevar por su magia panadera!

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Dirección: Av. Universidad #482, Narvarte Poniente, Ciudad de México, CDMX
Costo por persona: De $150 a $250 pesos
Horario: Martes a viernes de 8:00 a 21:00 hrs., sábado y domingo de 9:00 a 20:00 hrs.
Página Web: costra.mx
Facebook:
facebook.com/panaderiacostra
Twitter: twitter.com/costramx
Instagram: instagram.com/costramx

La Cadencia, bicicletas y sabores casuales en la Roma

¡Cadencia! No, no es el nombre de una nueva banda, es la palabra clave para un ritmo constante, especialmente en el mundo del ciclismo, donde se refiere al número de pedaleadas por minuto (RPM). Y cuando hablamos de pedalear, una buena cadencia hace toda la diferencia para ahorrar energía y disfrutar del paseo. Imagina un ritmo constante, fluido y orgánico… así es como deberíamos avanzar, ¡como un avance cotidiano!

Siguiendo esta filosofía, en la esquina de Chiapas y Tonalá en la Colonia Roma, nació un restaurante que comparte ese mismo espíritu: ¡La Cadencia! Este lugar busca ofrecer comida rica y accesible en un ambiente súper relajado, todo inspirado en el mundo de las bicicletas.

En La Cadencia encontrarás una gran variedad de platillos casuales, principalmente inspirados en la gastronomía mexicana. Y lo mejor de todo es que tienen opciones para todos los gustos: carnívoros, vegetarianos y veganos. ¡Nadie se queda sin disfrutar de una buena comida!

Si llegas por la mañana, te espera una deliciosa selección de huevos revueltos, estrellados y a la cazuela (¡también hay tofu revuelto!), molletes con distintos ingredientes, chilaquiles y enchiladas. Para acompañar, tienen jugos frescos y cafés o chocolates. Personalmente, te recomiendo los molletes con huevo a la mexicana y la cazuela pasilla, todo acompañado de un jugo ornitorrinco con piña y kiwi. ¡Perfecto para empezar el día con energía!

A la hora de la comida, puedes elegir entre platillos como el alambre de pollo al pastor, bistec con tocino o las opciones veganas de tofu u hongos. También puedes probar las albóndigas de lenteja y avena, el pisto con tofu, la pechuga de pollo a la plancha o a la mostaza, el pescado al ajillo o a la veracruzana, las puntas de arrachera a la diabla, el bistec en pasilla, el huarache de nopal asado o la gringa al pastor. Y si prefieres algo más sencillo, hay una gran variedad de sándwiches y baguettes.

La Cadencia es uno de esos rincones en la Roma donde puedes relajarte y disfrutar sin pretensiones. Es el lugar perfecto para comer bien, gastar poco y sentirte como en casa. Sin duda, una excelente opción para desayunar o comer si andas por la Colonia Roma.

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Dirección: Tonalá #183, Colonia Roma Norte, Ciudad de México, CDMX
Costo por persona: De $200 a $300 pesos
Horario: Lunes a domingo de 8:00 a 18:00 hrs.
Página Web: lacadencialoncheria.blogspot.com
Facebook:
facebook.com/la.cadencia
Twitter: twitter.com/LaCadenciaL
Instagram: instagram.com/la.cadencia

El Pescadito, sabores callejeros de Sonora en la CDMX

¡El Pescadito es una leyenda taquera entre lxs amantes de los tacos de pescado y camarón en la Ciudad de México y más allá! Este pequeño carrito que comenzó en las calles de Hermosillo, Sonora, en 1997, vendiendo Taco Fish y ceviches, se ha convertido en el punto de referencia para los tacos de pescado sonorenses en todo México. ¿Por qué? Muy sencillo: sus tacos son deliciosos, bien servidos y a precios súper accesibles.

Hoy en día, El Pescadito cuenta con más de 30 sucursales distribuidas entre Sonora, Estado de México, Sinaloa y la Ciudad de México, con 20 de ellas en la CDMX. Aunque han crecido un montón, el concepto y la carta siguen siendo simples para mantener ese sabor y servicio tan característicos.

¿Qué puedes encontrar en El Pescadito? ¡Exacto, tacos de pescado! Aquí podrás disfrutar del típico taco de pescado o de camarón estilo Ensenada, con su proteína capeada y una rica salsita de mayonesa y chipotle. Pero eso no es todo. También tienen una variedad de tacos de la casa que no te puedes perder, como el Enchilote Enchiloso (taco a la plancha con camarón y queso), el Que-Sotote (chile relleno de queso con camarón, con queso y camarón extra), el Ta-Cotote (chile relleno de Marlitún con camarón), el Tacochango (Marlitún con camarón) y el Taco de Marlitún (atún ahumado preparado tipo marlín). Y claro, no pueden faltar las quesadillas (con queso, obvio, porque son de Sonora) con pescado, camarón o Marliatún.

El proceso es súper sencillo. Llegas, te formas en la fila, y mientras esperas, alguien se acerca para preguntarte qué deseas tomar. Tienen agua de fresa, limón y chía, de cebada y de horchata, además de una buena variedad de cervezas nacionales y algunos refrescos. Esa misma persona te asignará una mesa y colocará tus bebidas allí para apartar tu lugar. Cuando llegas al frente de la fila, le pides al taquero los tacos que se te antojen, te los sirve al momento y te diriges a tu mesa. Pero antes de sentarte, no olvides darte una vuelta por la barra de salsas y ensaladas para darle ese toque personal a tus tacos.

ADVERTENCIA: Los tacos de El Pescadito están tan bien servidos que con dos o tres quedarás súper satisfecho.

El Pescadito es una de esas joyas que Sonora le ha regalado a la CDMX, una taquería donde todxs pueden disfrutar de unos deliciosos tacos de pescado y camarón a precios muy accesibles y en un ambiente relajado. Sin duda, una excelente opción para comer con las 3 B’s: bueno, bonito y barato.

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Costo por persona: De $150 a $250 pesos
Página Web: elpescadito.mx

Frëims, un rincón de waffles y otros antojos en la Condesa

En algún rincón de la calle Ámsterdam, se esconde un patio encantador donde puedes perderte por horas disfrutando de un delicioso café o chocolate y un desayuno espectacular… ¡sin importar si son las 9 de la mañana o las 9 de la noche! Estoy hablando de Frëims, un espacio gastronómico y cultural donde los waffles son las estrellas del menú. Sí, así es, ¡desayuno todo el día con waffles como protagonistas!

Aunque en Frëims puedes disfrutar de desayunos a cualquier hora, eso no es lo único que encontrarás. Su carta también ofrece una gran variedad de sándwiches, sopas, ensaladas, bowls de fruta y platillos casuales, con o sin waffles. Además, tienen una interesante selección de bebidas que incluye cafés, chocolates, jugos y licuados, cervezas (industriales e independientes), vinos (rosados, tintos, blancos y espumosos) y cocteles con alcohol. ¡Todo para que marides tus platillos de la mejor manera, sin importar la hora del día en que visites Frëims!

No importa si es de mañana o de noche, te recomiendo probar los Huevos Benedictinos (pochados con lomo canadiense y salsa holandesa sobre pan brioche), el Waffle Pizza (waffle relleno de queso mozzarella, salsa pomodoro, albahaca, aceitunas y salchicha italiana), y, por supuesto, los Molletes (waffle relleno de frijoles con queso, cubierto de más queso derretido, pechuga de pavo y/o tocino). También vale mucho la pena probar la Sopa de Jitomate Asado (con queso de cabra), la Hamburguesa de Sirloin, las Tostadas de Atún y el Risotto de Hongos, entre otros platillos.

Si vas por la mañana, marida tus platillos con un café preparado con el método que prefieras (dripper, chemex, brewer, aeropress, sifón japonés, etc.), o pide un Cold Brew, un Espresso, un Moka o cualquier otra bebida a base de café. No te olvides de preguntar por los diferentes chocolates (fríos y calientes) que ofrecen en Frëims. Y por la tarde o noche, nada como una refrescante cerveza, una copa de vino o algún coctel de la casa.

Frëims es uno de esos lugares donde puedes perderte por horas, disfrutando del clima, de música agradable, de algún buen libro y, sobre todo, de un delicioso desayuno o comida. Es una excelente opción para pasar la mañana o la tarde, en buena compañía y sin preocupaciones.

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Dirección: Amsterdam #62B, Hipódromo Condesa, Ciudad de México, CDMX
Costo por persona: De $300 a $400 pesos
Horario: Lunes a viernes de 8:00 a 23:30, sabado de 9:00 a 23:30 y domingo de 9:00 a 19:00 hrs.
Página Web: freims.rest
Facebook:
facebook.com/freims.mex
Twitter: twitter.com/freims_mex
Instagram: instagram.com/freims.mex

Sopes de la Álamos, antojitos y garnachas en la Álamos

Si vives o trabajas en la Colonia Álamos o por ahí cerquita, y estás buscando un lugar bueno, bonito y barato para comer, ¡los Sopes de la Álamos son para ti! Bueno, a ver, bonitos si consideras que las garnachas banqueteras tienen su encanto (¡y para mí, claro que lo tienen!). Es un pequeño local donde puedes disfrutar de ricos antojitos a precios muy accesibles, mientras disfrutas del ambiente de la Álamos, sentadx en la banqueta, en la jardinera o en la pequeña banca frente al lugar.

En el número 41 de la calle Soria, te toparás con un puesto chiquito, con cajas de refrescos en botella de vidrio, un refrigerador, un comal y una barra donde preparan tus garnachas. Al lado del comal, verás un menú pegado a la pared con las diferentes versiones de sopes que ofrecen. Hay de todo: desde los Sencillos (salsa y cebolla) hasta los de Alambre de Pollo o Res con Quesillo, Bistec con Nopal y Quesillo, Pollo con Mole, Pierna con Quesillo, Huevo con Tocino y Chuleta con Quesillo, ¡y muchos más!

Pero como no solo de sopes vive el hombre (o la mujer), en Sopes de la Álamos también tienen quesadillas de papa, pollo, carne, champiñones y queso, sencillas o combinadas. Además, hay gorditas de requesón o chicharrón, sencillas o con quesillo y/o nopal. Todo va acompañado de salsa verde o roja, de la que no pica, para darle más sabor. Y lo mejor, todo está hecho al momento, con masa preparada en el mismo lugar. ¡Uf, qué delicia!

Para acompañar tus sopes, quesadillas o gorditas, puedes disfrutar de un refresco de botella de vidrio bien frío. Tienen los típicos de la familia Coca-Cola y algunos más tradicionales como el Jarrito Rojo. También tienen aguas frescas de a litro, jugos y café, por si quieres disfrutar tu comida a la hora del desayuno, muy bien maridada.

Eso es todo, ni más ni menos. Los Sopes de la Álamos es un lugar sencillo donde encontrarás ricas garnachas y antojitos mexicanos a precios muy accesibles y sin pretensiones. Este changarro lleva más de 70 años consintiendo los estómagos de todxs lxs vecinos y trabajadorxs de la Colonia Álamos. Sin duda, una gran opción para comer barato si vives o trabajas en la zona.

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Dirección: Soria #41, Colonia Álamos, Ciudad de México, CDMX
Costo por persona: De $50 a $100 pesos
Horario: Lunes a sábado de 8:00 a 16:30 hrs.

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